Nuestra querida Escuela Agrotécnica de Casilda cumple 124 años, un largo camino recorrido, pleno de hechos, acciones, proyectos, recuerdos…

Es preciso decir que, algunos se mantienen más nítidos, frescos, eternamente jóvenes en los corazones de quienes los vivimos… otros se van tornando borrosos… una niebla delgada los envuelve y si bien están ahí, cuesta asirlos, incorporarlos a retinas que devuelven imágenes gastadas…

Por ello, un ordenado y sistematizado archivo custodia la memoria, fotos y documentos antiguos, que preservan sucesos únicos… Quizá sea una constante olvidar los motivos, los nombres de las personas que dieron origen a decisiones significativas, pero cada uno de nosotros/nosotras, desde su lugar, va atesorando los propios, entretejiendo relaciones y saboreando sonrisas saladitas de lágrimas, al evocar anécdotas, experiencias, vivencias singulares…

Sin embargo, los relatos, rescatados del pasado, de las historias de vida compartidas durante décadas, nos permiten recrear esos momentos, construir nuestras narrativas, y hoy la Escuela Agrotécnica “Libertador Gral. San Martín” de Casilda, cumple años…  una Escuela centenaria que, resignificada en sus propuestas, recupera, entre sus principales ejes de trabajo, gracias al cobijo de la Universidad Nacional de Rosario, la oportunidad de construir conocimientos al dialogar con ese pasado y reconocer los méritos de sus fundadores, interesados hace más de 100 años en enseñar y aprender a “cuidar la vida”, transmitiendo a centenares de jóvenes que pasaron por sus aulas, la amorosidad y la responsabilidad de mejorar las condiciones de vida de todas las personas, de las demás formas de vida, de los sistemas naturales y por ende, de las generaciones por – venir…

En este mes de septiembre que va llegando a su fin, nos regocijamos de ser parte de la historia viva, de ser cita obligada en las referencias históricas y bibliográficas de la Educación Agropecuaria Argentina.

Por eso, recordamos, hoy, la obstinada esperanza de nuestros fundadores, que un 24 de septiembre de 1900, dictaron los primeros cursos, y decidieron hacer de la Enseñanza Agropecuaria Argentina, un sello de identidad, actos que, sin dudarlo, constituyeron un salto cualitativo en la historia de nuestra humanización como especie que tiene la obligación de atesorar aquello de lo que forma parte, su espacio vital.

Para solaz y regocijo de quienes habitamos el presente, esos hombres y esas mujeres, nos legaron un predio maravilloso, parte del cual, desde el 2007, es un Área Natural Protegida, denominada “Florindo Donati” en homenaje a un entusiasta preceptor de la Escuela, que como aficionado, custodió amorosamente, durante décadas, los árboles también centenarios que pueblan el parque que disfrutamos cotidianamente.

La foto que compartimos, muestra entre esos árboles añosos, los prime

ros rayos del sol… Amanece, siempre amanece en la AGRO… y cada día se constituye en un nuevo desafío…

¡¡¡Celebremos ser parte de esta casa!!! ¡¡¡Qué viva la AGRO de Casilda!!!